La vida y obra de Benjamín Solari Parravicini
Benjamín Solari Parravicini, nacido en Buenos Aires en 1898, fue un profeta argentino conocido como el "Nostradamus de América". Proveniente de una familia de artistas y científicos, desde niño mostró una sensibilidad especial y conexión con otros planos. Se describía a sí mismo como "El niño de Leo" y sus primeros años estuvieron marcados por una profunda conexión con la naturaleza y una percepción del mundo diferente a la de otros niños.
Parravicini comenzó a plasmar sus visiones en dibujos proféticos, conocidos como psicografías, que abarcaban desde el destino de la humanidad hasta los viajes interplanetarios. Su infancia estuvo marcada por un evento que pudo haber influido en su capacidad para canalizar eventos futuros: la alarma generada por la posible colisión de un cometa con la Tierra.
Las psicografías y el futuro de la humanidad
Las psicografías de Parravicini son únicas en la historia de la profecía y abordan temas complejos como el destino de la humanidad, cambios geográficos, el fenómeno OVNI y el progreso de la ciencia.
Parravicini también destacó en la pintura, llegando a exponer sus obras y recibir reconocimiento, incluso del presidente de Argentina y en exposiciones internacionales. Sin embargo, su obra profética, las psicografías, es la que ha generado mayor interés y debate.
Parravicini realizó psicografías desde los años 30 hasta los 70 del siglo XX, abarcando eventos históricos y visiones del futuro. Sus profecías han sido objeto de estudio y análisis, con interpretaciones que van desde advertencias sobre el caos provocado por el hombre hasta visiones de esperanza en una nueva humanidad.
Algunas de sus psicografías más destacadas incluyen predicciones sobre el ataque a las Torres Gemelas en 2001, el ascenso de Fidel Castro, la Segunda Guerra Mundial, la era atómica, los satélites artificiales, los trasplantes de corazón y la llegada del hombre a la Luna.
El caos del hombre y el caos de Dios
Parravicini predijo un futuro marcado por el "caos del hombre", un período de guerras y desastres naturales provocados por la humanidad, incluyendo la posibilidad de una guerra nuclear.
Además, sus psicografías hablan de un "caos de Dios", un cataclismo apocalíptico, posiblemente causado por el impacto de un asteroide, que transformaría la Tierra. A pesar de estas visiones sombrías, Parravicini también vislumbró la emergencia de una nueva humanidad, más consciente y evolucionada espiritualmente, que surgiría tras la destrucción.
Argentina juega un papel importante en sus profecías, siendo vista como un refugio para los sobrevivientes del cataclismo. Parravicini también abordó temas como el avance de China, el cambio climático, las pandemias, la inteligencia artificial, la telepatía y la llegada de naves extraterrestres.
La obra de Benjamín Solari Parravicini, compleja y enigmática, continúa generando fascinación y debate, invitando a la reflexión sobre el destino de la humanidad y el papel del ser humano en el universo.